sábado, 18 de enero de 2014

'Condenadme, no importa 

LA HISTORIA ME ABSOLVERÁ'



http://www.youtube.com/watch?v=2CdVNmBdP8c

'Un sobreviviente socialista en un mundo capitalista. Para algunos es un demonio, para otros un símbolo de resistencia y justicia social'.

jueves, 9 de enero de 2014

La voz dormida

Cuando La voz Dormida cayó en mis manos, sabía lo que iba a leer, conocía el sufrimiento de las mujeres durante la posguerra española y por supuesto sabía de su heroicidad, sin embargo lo que nos sabía era cuánto me iba a marcar esta novela y lo que iba a significar para mí. Este libro representa nuestra historia, tanto la de las mujeres como la de los hombres. Es una novela imprescindible tanto para entender una guerra, una lucha y una dedicación, como para nuestro propio conocimiento e idea de nosotros mismos. Un relato de valentía y sacrificio, y por mi parte de orgullo, porque en ellas veo a mis familiares, a mi bisabuelo fusilado, a mi abuela, porque aún no sabe donde está su padre, a todos ellos que lucharon por una justicia que nunca ha llegado.
La voz dormida es el relato real de un grupo de mujeres encarceladas en la prisión madrileña de Ventas. Relegadas a un ámbito doméstico, estas mujeres tomaron las riendas de su vida por la igualdad y la justicia. Hortensia, Reme, Tomasa y Elvira son las cuatro mujeres que coinciden en esta cárcel. Ellas, nos cuentan su día a día en la cárcel, sus historias, sus pensamientos, sus ilusiones, nos hablan de sus familias y cómo llegaron hasta la cárcel. Hortensia, una miliciana embarazada espera su ejecución hasta que de a luz, el único hilo que tiene con el exterior es su hermana Pepita, que aunque joven y achantada, supera su miedo y llega a ser una gran persona, valiente y con valor.
Es una obra que impresiona su descripción y su capacidad de emocionar y conmover a al lector, la descripción de las torturas y barbaridades de los franquistas, desconocidas para la mayoría, quedan grabadas en la mente para siempre; arrojaban a los comunistas a las profundidades de las minas, mientras morían aplastados unos encima de otros, con el dolor de todos los huesos rotos, o como tirar a una familia entera desde lo alto de un puente, para luego dispararlos sin ningún tipo de sensibilidad. Esta novela dura, nostálgica, triste y desgarradora también nos deja  momentos de emoción e incluso de ánimo, como el momento en el que se niegan a cantar el himno franquista y con el puño en alto y la voz bien fuerte empiezan a entonar La Internacional, entre otros momentos de desafiar a las carceleras sin compasión.
Es una novela que no termina después de leerla, se quedan marcadas las imágenes de Hortensia, Elvira y las demás de una manera que acaban formando parte del lector para siempre. Quizás, este tipo de libros u otras obras a cerca de nuestra Guerra Civil y su posguerra, son tan duras porque nunca se ha hablado de estos crímenes; aún tenemos miles de muertos en las cunetas y familias enteras que no saben dónde están sus antepasados, historias que no han sido juzgadas, criminales que han muerto plácidamente en sus camas mientras muchos aún no encuentran su reposo. El franquismo no ha sido sentenciado, ni juzgado, todas las heridas están abiertas, se han querido tapar mientras todavía supuraban. Dulce Chacón, autora de la novela dedica su libro 'a los que se vieron obligados a guardar silencio', pero añado 'a los que hoy todavía nos vemos obligados a guardar silencio'.

* La fotografía es una miliciana de la columna Uribarri con un niño en brazos.

miércoles, 8 de enero de 2014

PAUL SWEEZY. 
Teoría del desarrollo capitalista

Resumen de los capítulos: I, II, III, IV, V, VI y VIII.

Capítulo I. El método de Marx.
Marx da otra visión para poder comprender los problemas económicos. Sus principales contribuciones a la economía política son de carácter metodológico. El método de la abstracción consiste en resaltar lo esencial y hacer posible su análisis. El propósito de la misma no consiste en alejarse del mundo real, sino aislar ciertos aspectos del mundo real para fines de investigación intensiva. Sweezy, sin embargo, ve un problema en que la abstracción no puede ser objetiva y por lo tanto es incapaz de dar conocimiento.
El método de Marx es sobretodo histórico; los individuos, así como los sistemas sociales recorren un ciclo de vida, cuyo producto de cambio es producto de la acción humana. Como anunciaba Marx, ‘los hombres hacen su historia en circunstancias ya existentes, dadas y transmitidas del pasado’. Mientras que Marx afirma que el modo de producción y sus movimientos son la clave del cambio social y que la relación entre capital y trabajo es lo principal para la producción; Sweezy lo ve como una relación de cambio: el obrero recibe dinero por su fuerza de trabajo y el capitalista compra la fuerza de trabajo del obrero.

Capítulo II. El problema del valor cualitativo
Mercancía es todo lo que se produce para el cambio. El valor se genera a través de unas relaciones de producción (es creado por la sociedad) y el precio es la manifestación del mercado; estos deberían ser similares a largo plazo, sin embargo en la práctica no ocurre eso. Toda mercancía posee una doble cara: valor de uso y valor de cambio. El primero, cualitativo, es el de la mercancía, es subjetivo porque somos nosotros quienes le ponemos el valor y el segundo aparece como relación cuantitativa entre las cosas, este se aplica en el intercambio de mercancías.
La fuente de valor es el ser humano.

Capítulo III. El problema del valor cuantitativo
El papel del trabajo es fundamental en cualquier organización, además de que este se aplique a la producción y que los productos sean distribuidos entre los miembros de la misma. No debe tenerse en cuentas más trabajo que el necesario, así el trabajo más calificado debe producir mayor valor que uno inferior. Por lo tanto, la relación entre el valor y el precio de la producción es que el precio es la expresión monetaria de este, el ‘precio de producción’ es una modificación de los valores.
Sin embargo, aunque en los monopolios se pueda seguir comparando mercancías, el valor cuantitativo se ve perturbado.

Capítulo IV. Plusvalía y Capitalismo
En el capitalismo, unos cuantos individuos tienen la propiedad de los medios de producción mientras que otros realizan el trabajo; de manera, que la fórmula de este sistema acaba siendo D-M-D’, en el que se incrementa el valor de D; es decir el capitalista desembolsa una cantidad de dinero a cambio de fuerza de trabajo y medios de producción si va a ganar una mayor cantidad de dinero, este incremento del dinero, Marx lo llamó plusvalía, es ‘el fin directo y el incentivo determinante de la producción’.
Como la fuerza de trabajo para un capitalista es una mercancía más, su valor es el de los medios de subsistencia necesarios para el mantenimiento del trabajador, de aquí deducimos que la fuente del trabajo es la fuente de la plusvalía.

Capítulo V. Acumulación y ejército de reserva.
Explica la  Reproducción simple como un sistema capitalista que conserva indefinidamente las mismas dimensiones y las mismas proporciones entre sus diversas partes. Para ello, es necesario que los capitalistas repongan el capital gastado y empleen su plusvalía en el consumo, así como que los obreros gasten todo su salario en el consumo. Con esto se garantizaría la inmutabilidad de las escalas sociales del sistema. Esta definición es utópica, debido a que el fin de un capitalista es la acumulación de capital.
Una consecuencia es el valor de la fuerza de trabajo al considerar, erróneamente como una mercancía común. El trabajo tiene el precio natural y el precio del mercado, el preocupante es el último, porque está ligado a la oferta y la demanda. Esto es explicado con la teoría del ejército de reserva del trabajo; este se nutre de aquellos trabajadores que han sido sustituidos por maquinaria, debido al deseo de los capitalistas de recortar costes para aumentar su capital. Aquí es donde Marx hace una aportación al considerar las crisis y depresiones como un mecanismo capitalista para aumentar este ejército de reserva.

Capítulo VI. Tendencia descendente de la tasa de ganancia.
El avance del proceso de acumulación capitalista permite la mecanización de los medios de producción, es decir, aumenta la productividad y la composición orgánica del capital, con esto, Marx, anuncia la relación decreciente entre la tasa de ganancia y la composición orgánica del capital:
g=p’ (1-o)
Esta ley, fija una tendencia que se ve influida por una serie de causas contrarrestantes: a) abaratamiento de los elementos del capital constante, b) aumento de la intensidad de explotación, c) depresión de los salarios por debajo de su valor, d) sobre-explotación relativa y e) comercio exterior.
La crítica a dicha ley es: 1. El supuesto de una plusvalía constante, la suposición de que la composición orgánica del capital es el punto de partida para deducir la trayectoria de la tasa de ganancia

Capítulo VIII. La naturaleza de las crisis capitalistas
Las crisis están integradas al sistema capitalista. Las crisis resultan de la interrupción en el proceso de circulación de mercancías físicas o de dinero, esto se puede producir debido a situaciones espontáneas como una guerra o una catástrofe natural. En los sistemas de producción simple de mercancías es difícil que se pueda producir una crisis debido a su carácter fluido y continuo.

Hay dos tipos de crisis en consecuencia de: 1. que las mercancías se vendan y compren a su precio de equilibrio y conlleva a una depresión de la tasa de ganancia y 2. Hay una sobreproducción y un descenso del precio del mercado por lo tanto se acaba con el precio de equilibrio y disminuye la tasa de ganancia.